2 Pedro 3 - La Biblia Textual

Libro de 2 Pedro
Capitulos:

123

1 - Amados, ésta es ya la segunda epístola que os escribo, en las cuales despierto con exhortación vuestro limpio entendimiento;

2 - para que os acordéis de las palabras predichas por los santos profetas, y del mandamiento del Señor y Salvador, proclamado por vuestros apóstoles.

3 - Conociendo primero esto: En los postreros días vendrán burladores, andando según sus propias concupiscencias,

4 - y diciendo: ¿Dónde está la promesa de su advenimiento? ¡Pues desde que durmieron los padres todo permanece igual desde el principio de la creación!

5 - Ciertamente, ellos ignoran voluntariamente que en el tiempo antiguo fueron hechos por la palabra de Dios los cielos, y la tierra, que proviene del agua y por el agua subsiste;

6 - cosas por las cuales el mundo de entonces pereció inundado por agua.

7 - Pero los cielos y la tierra de ahora quedan reservados por la misma Palabra, guardados para el fuego en el día del juicio y de la perdición de los hombres impíos.

8 - Pero amados, no ignoréis esto: que para el Señor un día es como mil años, y mil años como un día.

9 - El Señor no retarda la promesa, como algunos la consideran tardanza, sino que es paciente hacia vosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.

10 - Pero el día del Señor vendrá como ladrón, en el cual los cielos desaparecerán con gran estruendo, y los elementos se disolverán con el intenso fuego, y la tierra y las obras que en ella hay serán descubiertas.

11 - Puesto que todas estas cosas han de ser disueltas, ¡qué clase de personas es necesario que seáis en santa y piadosa manera de vivir,

12 - aguardando y apresurando el advenimiento del día de Dios, a causa del cual los cielos, siendo encendidos, se disolverán; y los elementos, siendo quemados, se fundirán!

13 - Pero, según su promesa, esperamos nuevos cielos y nueva tierra, en los cuales mora la justicia.

14 - Por lo cual amados, en tanto que aguardáis estas cosas, procurad con diligencia ser hallados por Él en paz, sin mancha e irreprensibles.

15 - Y considerad la paciencia de nuestro Señor como salvación; como también nuestro amado hermano Pablo os escribió, según la sabiduría que le fue dada,

16 - como también habla de esto en todas las epístolas, en las cuales hay algunas cosas difíciles de entender, que los indoctos e inconstantes tuercen, como también las otras Escrituras, para su propia perdición.

17 - Así que vosotros, amados, conociéndolo de antemano, guardaos para que no caigáis de vuestra firmeza arrastrados por el error de los libertinos.

18 - Antes bien creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A Él sea la gloria ahora y hasta el día de la eternidad.